Algunos datos
Recientemente se han publicado datos oficiales, según los cuales el 60% de los estudiantes de enseñanza secundaria del Uruguay, han reprobado el curso. Alarmante. Pero, si a ese dato le agregamos el otro dato extra, que el 50% de los jóvenes en edad de estar cursando estudios secundarios, no concurre a ningún centro de enseñanza, nos encontramos con que, del total de jóvenes en edad de cursar estudios secundarios, solamente el 20% aprobó el curso correspondiente, en tanto el 80% (4 de cada 5 adolescentes) NO APROBÓ O APRUEBA el curso correspondiente a su edad cronológica y psicológica. Este dato ya no es alarmante, es DESASTROSO. ¿Culpa de la enseñanza secundaria? ¿Culpa, como dice el maestro Florit, de las inasistencias de los docentes? Me parece que no.
Me parece que este ya no es un problema DE la enseñanza, sino que SE VE REFLEJADO en ella. Dicho de otro modo, tal vez este NO ES EL PROBLEMA, sino solamente un SÍNTOMA.
Creo que la enfermedad es el problema social. Una sociedad descoyuntada. Una sociedad que ha destruído a la familia, quitándole, entre otras cosas, su capacidad de supervivencia. En realidad, estos jóvenes, seguramente, tienen un subdesarrollo físico, psíquico, mental debido a la sub alimentación a la que han sido sometidos desde hace no menos de 20 años. Hoy se están empezando, sólo empezando a ver las consecuencias de aquella sub alimentación. Y lo que es más crítico, esa sub alimentación se ha propagado a una franja poblacional que hoy abarca más del 50% de los uruguayos. Cuéntese nada más, a modo de ejemplo, el número de asentamientos que hay en la actualidad. Multiplíquese por el número de niños y jóvenes que en ellos vive, más los niños y jóvenes que viven en albergues con sus padres, más los que viven en pensiones, más los que viven sencillamente en la calle, y se tendrá el verdadero panorama de lo que le espera al Uruguay en los próximos 10 a 25 años.
Ya no es cuestión de planes de emergencia. Es cuestión de planes de trabajo, de creación de cooperativas de producción en todo el país, que no podrán ser autorreguladas, sino que deberán ser reguladas, necesariamente, desde el gobierno nacional, es cuestión de reabrir ya, sin dilaciones, industrias nacionales como frigorífico nacional, curtiembres, subsistencias (de las intendencias). Ya no se resuelve con "caridad" gubernamental de 1600 o 2000 pesos por mes, sino con fuentes de trabajo QUE EL GOBIERNO NACIONAL DEBE GENERAR, CREAR Y CO-ADMINISTRAR.
Me parece que este ya no es un problema DE la enseñanza, sino que SE VE REFLEJADO en ella. Dicho de otro modo, tal vez este NO ES EL PROBLEMA, sino solamente un SÍNTOMA.
Creo que la enfermedad es el problema social. Una sociedad descoyuntada. Una sociedad que ha destruído a la familia, quitándole, entre otras cosas, su capacidad de supervivencia. En realidad, estos jóvenes, seguramente, tienen un subdesarrollo físico, psíquico, mental debido a la sub alimentación a la que han sido sometidos desde hace no menos de 20 años. Hoy se están empezando, sólo empezando a ver las consecuencias de aquella sub alimentación. Y lo que es más crítico, esa sub alimentación se ha propagado a una franja poblacional que hoy abarca más del 50% de los uruguayos. Cuéntese nada más, a modo de ejemplo, el número de asentamientos que hay en la actualidad. Multiplíquese por el número de niños y jóvenes que en ellos vive, más los niños y jóvenes que viven en albergues con sus padres, más los que viven en pensiones, más los que viven sencillamente en la calle, y se tendrá el verdadero panorama de lo que le espera al Uruguay en los próximos 10 a 25 años.
Ya no es cuestión de planes de emergencia. Es cuestión de planes de trabajo, de creación de cooperativas de producción en todo el país, que no podrán ser autorreguladas, sino que deberán ser reguladas, necesariamente, desde el gobierno nacional, es cuestión de reabrir ya, sin dilaciones, industrias nacionales como frigorífico nacional, curtiembres, subsistencias (de las intendencias). Ya no se resuelve con "caridad" gubernamental de 1600 o 2000 pesos por mes, sino con fuentes de trabajo QUE EL GOBIERNO NACIONAL DEBE GENERAR, CREAR Y CO-ADMINISTRAR.
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